Nada sobre la Tierra puede parar al hombre que posee la fuerza mental para lograr sus metas (Marioni 78)
Lo importante no es llegar, lo importante es el camino (IceMan)
”No lo intentes. Hazlo, o no lo hagas, pero no lo intentes.” (La Central de Abastos)

28 abril 2008

4ª Ruta cicloturista I.A.C. Group. Vía Verde Cidacos/Préjano

Kilómetros: 52.90.

Acumulado año: 905.06 Kms.

17 Bikers, 2 furgonetas, 2 quads y 1 moto.

Con una temperatura de 6º C llegamos a nuestro punto de encuentro, el parking de Alcampo para iniciar nuestra singladura. Son las ocho de la mañana, las bicis cargadas, los ánimos a tope y las ganas de pasarlo bien por encima de todo. Por nuestras cabezas circula la pregunta “¿lloverá?”. Nuestra gente en la Rioja Baja nos dice por teléfono que el cielo está con nubes y hace un poco más de calor, 10 º, esto nos anima y a las ocho y cuarto iniciamos el viaje a nuestro punto de partida, Autol.

Media hora más tarde descargamos nuestras monturas, la gente de apoyo ya está lista para el inicio y conocen bien su labor. Comenzamos a dar pedales para entrar rápidamente en calor, el viento a favor nos ayuda a ir un poco más deprisa. Pasamos por la antigua y ahora abandonada estación. Vamos pedaleando entre viñedos y de repente nos topamos con la entrada al primer túnel de la ruta. La sensación entre la luz y la penumbra nos deja ciegos un instante hasta que nuestros ojos se hacen a la oscuridad. Es angosto pero está bien iluminado, la temperatura ambiente sube, el viento deja de soplar e instintivamente nos ponemos en fila india manteniendo dos o tres metros de distancia, es una sensación diferente, no hay luz, sonidos, solo nosotros y 700 mts. de oscuridad. La salida nos deja en el segundo cruce peligroso de la carretera a Arnedo. Los cortados y el castillo a la derecha nos dan la bienvenida a Quel, Paco está esperando y se une al grupo. Llegamos a la capital del calzado, en este punto la ruta no sigue el trazado original, que iba por el centro de ciudad, sino que sigue una variante bien indicada junto al río. Debemos tener precaución pues la vía tenemos que compartirla con coches. Con el Cidacos a la izquierda, pasamos el Monasterio de Vico, llegamos a Herce, paramos a tomar un respiro en el frontón. Hecho esto volvemos a dar pedales, cruzamos el Cidacos un poco más adelante por un puente de hormigón. Ahora vamos por la margen derecha, entre árboles. El terreno es espectacular, pica un poco más hacia arriba hasta el cruce a Préjano. A partir de este cruce entramos en el cañón de Arnedillo, cortados de roca verticales y una antigua cantera de piedra nos deja en la entrada al segundo túnel. Los quads van por la carretera, pues por las puertas de forja no pueden pasar, Moli y su moto cierra el grupo. Este es más largo y ancho que el anterior además está mejor iluminado. La salida del túnel es la antigua estación de Arnedillo, antaño rehabilitada como balneario, fin de la primera ruta. En este punto decidimos almorzar, no todo va a ser sudar. Nuestro chef ha preparado un espectacular menú, filetes empanados con pimientos, champiñones, chorizo y salchichón de ciervo, pan tierno y una buena bota de vino a la que no dejamos parar.
Bajamos por la misma vía hasta el cruce de Préjano, una pequeña subida nos lleva a otro cruce. Giramos a la izquierda, siempre subiendo hasta el cruce con la carretera donde la gente de apoyo nos facilita el paso. Esta vía pica un poco más hacia arriba que la del Cidacos aunque sigue siendo suave. A la derecha las antiguas minas de carbón y encima de ellas los Cortados de Peñalmonte. Después de 5 kms. entre olivos y almendros llegamos a Préjano, atravesamos el último túnel, mucho más pequeño que los anteriores , aunque nos causa la misma sensación. En los pies del castillo paramos a hacer la foto con el monte Peña Isasa enfrente. Comienzan a caer unas finas gotas y decidimos retornar la marcha, el aire ha cambiado y lo volvemos a tener de frente. Rápidamente, unos más que otros pues los de adelante deciden dar alegría a la marcha, llegamos a Arnedo, Paramos para reagruparnos y salimos zumbando ya que la lluvia sigue cayendo. Llegamos a Quel y despedimos a Paco. Ahora la lluvia cae con más fuerza por lo que nosotros aceleramos, Pasamos el túnel y llegamos a nuestra meta: La estación de Autol.

Después de 52 Kms. estamos cansados, mojados, pero contentos pues cuando se lucha por algo que vale la pena, cuanto más cuesta, más dulce es el resultado.

Un evento que organizamos minuciosamente cuatro amigos a los que nos une una afición, la bici de montaña, con la ayuda inestimable de Javi, Ernesto, Moli, Ángel y Joaquín que desinteresadamente nos acompañan abriendo el camino, en cruces peligrosos, cerrando el pelotón y preparando la vitualla, a IAC por la intendencia, a David por la burocracia y a los ciclistas pues sin vosotros nada de esto se llevaría a cabo.

La Organización.
Miguel, José Luis, Miguel Ángel y Elías.
El miercoles 30 por la noche tenemos la revancha, flojaos el cinturón.

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