Kilómetros: 65
Acumulado Grupo año: 680,96
Dificultad: ◊
IDG o Índice de Disfrute Global: 9
Cronica por: Chuchi
Puente
En la Ñ, a las 8 y media, nos juntamos solo 5
personas humanas.
Es sábado de esta primavera traicionera y de
momento no hace mucho calor, aunque dicen las lenguas que luego subirá la
temperatura: Ya veremos.
El caso es que visto que las gentes andan
disfrutando de la semana santa o rezando, vaya usted a saber, montamos y nos
dirigimos hacia el parque del Ebro, pues hemos quedado con Piloto en la
depuradora del Iregua.
Allí nos lo encontramos junto a Victor, un
amigo suyo, que nos acompañara en la ruta.
Después de las presentaciones y saludos de
rigor, salimos hacia Villamediana. Pasamos por encima de la autopista, cruzamos
la gasolinera y en la cuesta que sigue, Roberto que le da tan fuerte a los
pedales que se le sale la cadena, la cual se le mete entre la rueda y los
piñones.
Usamos destornilladores, alicates, fuerza
bruta y hasta oraciones pero nada, la cadena no quiere salir, así que Piloto
recurre a la llamada telefónica y contacta con Emilio, con el que había quedado
en Murillo, para ver si le venía bien ejercer de portabicis, porque la maldita
cadena se ha quedado tan clavada que ni girar la rueda quiere.
Emilio aparece, monta a Roberto y se lo lleva
al servicio técnico y nosotros que seguimos la ruta, con una hora de retraso, y
con el calor que ya que empieza a pegar.
Sin mayores incidentes llegamos a Murillo,
donde nos volvemos a juntar con Emilio, montamos y pedaleamos dirección al
Molino de Ocon, que es el final de la ruta.
Pasamos pista tras pista, llanura tras
llanura, con alguna loma sin importancia, pero que cansa igualmente, sobre todo
si no tienes bici eléctrica ni 30 años, hasta que llegamos al Molino. Allí con
el calor ya pegando, pues resulta que las lenguas tenían razón, nos hacemos
algunas fotos que el paisaje bien lo merece, nos comemos unas chuches y salimos
disparados hacia Logroño.
La vuelta es más entretenida, entre otras
cosas por eso de ser cuesta abajo (que gran cosa es la gravedad) y porque hay
alguna pista más estrecha y con menos polvo.
Pasamos Ventas Blancas, a toda leche, y antes
de llegar a Murillo nos encontramos con un paso por donde va el rio Jubera,
normalmente seco, pero que hoy baja con alegría.
Pero no hay rio que nos amedrante, nos
bajamos de las bicis, y lo atravesamos con ellas en el hombro. Una vez que
tenemos los pies mojados aprovechamos para limpiar las bicis, echar fotos y
risas por partes iguales
Fresquitos y con los calcetines chorreando
seguimos camino a Murillo, dejamos a Emilio y los demás bajamos a toda leche
hacia Logroño, al cual llegamos a eso de las 2 y media. 6 Horas y media de ruta
que nos ha salido pues eran 65 km y la cadena maldita que también se llevó su
tiempo, pero el buen humor y el disfrute no faltaron, así que seguro que
volvemos el próximo sábado..
LA TRASTIENDA DE LAS
MOMIAS:
Y nada más, nos despedimos hasta la próxima,
que esperamos sea el sábado siguiente.
Si andas en bici para disfrutar, si te queda mucho
mundo por ver y pocas ganas de tomarte la vida
en serio.
Seguramente llevas un 'Momia' dentro.
No olvidéis seguirnos en nuestro blog para enteraros
de todo lo que sucede en el mundo Momia. No
todo lo que pasa sucede, y no todo lo que sucede tiene que pasar, puede ser
cuento, invención o chiste, pero el sábado que viene en la eñe a las 9:00
lo veremos.
Las clasificaciones semanales quedan
“asin” premios awards Momias.
Kilómetros Individuales PINCHAR AQUÍ premio al (yo sí estuve
esa mañana).
Premios Gallifantes a (ponga un mecánico en
su mochila), al que tiene más averías
El Tigre.
Gallifantes: 2
Dover Man.
Gallifantes: 1
Más Gallifas pinchar aquí:
Premios Gallifantes a, (yo me como esa
galleta Bici Thorpe)
Callahan. Gallifantes: 1
Más Gallifas pinchar aquí:
Chuchi Puente, Dover
Man.
El “Analis” del TRACK – IBP
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