CASTROVIEJO
Hoy nos
juntamos a petición de Yoye para marcarnos una ruta Horsss category. Al final
nos juntamos 8, a los que se unirán en Prado Salobre un par más de componentes.
Hoy
vamos a ritmo reservón, se nota las fiestas y que el nivel de forma esa bajo.
Como ya les he prometido la ruta será larga y durilla, así que se lo toman con
tranquilidad.
Poco a
poco subimos hasta Sorzano por donde siempre. Paramos para comer algunas
“chuches” y pensamos en hacernos una foto en el lavadero, ya que no recordamos
tener alguna hecha allí.
Cruzamos
el pueblo para la subida del día, no se cómo explicarla, despacio como siempre,
la primera parte aburrida como siempre…. Hay que decir que el camino está mejor
que este verano lo cual ayuda, lo que no ayuda son los polvorones y el cava.
Tras un
par de paradas para reagruparnos (me tienen que esperar, soy el que menos ritmo
lleva) llegamos a la torre de vigilancia. Un par de fotos y continuamos hasta
las antenas.
Encontramos
un barro en la subida que aunque no es pegajoso se “agarra” a las ruedas
haciendo la cuesta aun más dura. El barro nos acompañara durante todo el cordal
para “regocijo” de nuestras piernas. También nos acompañara un sirimiri que
poco a poco cala, también para “regocijo” de nuestros músculos. ¡Qué tendrá la
humedad que castiga tanto como el frio!.
Parada
en las antenas donde algunos se meten el bocata entre pecho y espalda, otros
nos conformamos con una barrita energética. Continuamos por el cordal en un
sube baja endurecido por el barro, hasta llegar al final. Hoy en lugar de bajar
por la pendiente fuerte bajamos por un camino que sale a la izquierda. Menos
desnivel pero más técnico, que nos dejara tras cruzar una portilla en unas
praderas preciosas. Así campo a través, o praderas a través buscamos el
comienzo de la pista que nos llevara en una exhalación hasta Castroviejo.
Subimos
al pueblo para repostar líquido, y tras un pequeño atropello con caída incluida
(hay quien para caer prefiere el colchón de un compañero)
Carretera
para continuar, ya que no hay muchas alternativas. Pasamos junto a Santa Coloma
y nos salimos de la carretera para tomar dirección Ventosa. Como se notan los
kilómetros, el frio y la humedad. Hay a quien se le atraganta hasta la más
pequeña subida. Mi pequeña satisfacción, los que subían como motos ahora pasan
al autobús, yo en cambio me encuentro bien,
así que disfruto de la subida.
En
Ventosa amago de parar, pero ya la peña esta con ganas de llegar a casa y no
paramos ni un segundo. La vuelta se hace a velocidad de crucero, sin muchas
ganas de hablar, pero con las imágenes de los preciosos paisajes que hemos
visto y la satisfacción de otra ruta superada.
En
Navarrete nos despedimos de los compañeros de Villamediana y continuamos por la
Grajera. Llegamos a Logroño y cada cual toma su camino, vamos justos de tiempo.
Aun así algunos nos vamos a dar un manguerazo a la bici para poder entrarla en
casa.
Trastienda
de los momias.
La ruta
quizá un poco dura para las fechas en las que estamos.
Con
esta compañía no hay ruta que se resista.
Dura
pero disfrutona.
UN CAFECITO EN SOTES
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